Reciben "año del cerdo" en el Barrio Chino de la Ciudad de México
Gloria Marvic Garcia/PI
Viernes, 16 de Febrero de 2007
Ocasión que da pie a una serie de festejos en el denominado Barrio Chino enclavado en el primer cuadro de la capital mexicana. Foto:PI/Octavio NAVA
|
|
ver galería
|
México D.F. 16 de febrero.- Seguidos por una comitiva de mujeres que buscaban ansiosas la buena suerte, los tradicionales Dragones Chinos intentaban abrirse paso entre la gente curiosa y festiva por un año nuevo que está por llegar en el continente Asiático.
Se trata del año del Cerdo, cuyo sello en la gente es la sensibilidad, inteligencia y alegría, según la creencia. Mientras que el año que se abandona fue el del perro. Ocasión que da pie a una serie de festejos en el denominado Barrio Chino enclavado en el primer cuadro de la capital mexicana.
Adornado con globos y listones rojos, los restaurantes y bares del tradicional pasillo exhiben sus regordetas representaciones de Buda, ofrecen amuletos, comida y artesanías, muchas de ellas, producto del la producción masificada del país más poblado del mundo.
Más tarde, acompañados por el sol declinante de un día caluroso, hacen su aparición los jóvenes y niños del Centro Mexicano de Cultura y Artes Marciales de China, quienes, con sus estilizados movimientos relatan ante cientos de espectadores los principios de artes marciales como el Tai Chi Chuan y el Kung Fu.
Actividades que se extenderán durante tres días, para culminar con la fiesta del domingo 18 de febrero, cuando en realidad hará entrada el año según el calendario Lunisolar que es el calendario tradicional de los chinos.
Caracterizado por doce animales, la calendarización de los asiáticos se mezcla con superstición, la cual indica que cada animal determina las cualidades o defectos de una persona. Así, quien nació bajo el signo del dragón tenderá al poder y la prosperidad; la serpiente confianza en uno mismo y habilidad para el dinero; el caballo es inflexible en su amor por la libertad y la cabra representa la bondad y consideración a los demás.
Mientras que las personas nacidas en los años del gallo son inteligentes y líderes; bajo el signo del perro, imparciales y lógicas. La rata es laboriosa y cuidadosa con el dinero, el buey trabajador y paciente; el tigre atrevido y dinámico y el conejo reservado y artístico.