Parientes de periodista de EEUU asesinado piden justicia

AP
Viernes, 23 de Marzo de 2007

"Hicimos notar que durante todo el mes de noviembre los fiscales federales llegaban a conclusiones que eran, en muchos casos, ilógicas". Foto:PI/Luis HERNANDEZ

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Mexico. 23 de marzo. El hermano del periodista estadounidense asesinado en México dijo el viernes que tiene la esperanza de que un nuevo análisis del tiroteo permita hallar a los culpables.

En una conferencia noticiosa para concluir la visita de una semana de su familia a la Ciudad de México y a la de Oaxaca, donde Bradley Roland Will fue asesinado el 27 de octubre, su hermano Craig Will dijo que funcionarios federales han acordado revisar la evidencia después que la familia planteó dudas sobre la forma en que los fiscales estatales han manejado la investigación.

Sin embargo, la oficina de la Procuraduría General de la República no ha intervenido aún ni se ha encargado de la investigación.

Will, de 38 años, mencionó que nuevos testigos rindieron testimonio ante funcionarios federales, narrando cómo cayó su hermano ante los balazos mientras efectuaba tomas de video en medio de violentas protestas en la ciudad de Oaxaca, a 350 kilómetros al sur de la capital. Añadió que algunos testigos habían sido presionados e intimidados, pero se rehusó a dar detalles.

Durante un mes antes de su muerte, el periodista y activista de 36 años grabó imágenes en video y envió despachos informativos de las protestas contra el gobierno estatal a indymedia.org, sitio en internet dirigido por una red de pequeños centros noticiosos sin fines de lucro.

"Hicimos notar que durante todo el mes de noviembre los fiscales federales llegaban a conclusiones que eran, en muchos casos, ilógicas e irracionales", expresó. "También estaban ignorando mucha, mucha evidencia".

Sus padres, Kathy y Howard Will, estuvieron en Oaxaca el viernes para asistir a una recreación de la escena del crimen realizada por investigadores federales. Culpan a sicarios de la policía por la muerte de su hijo.

Craig Will, quien vive en Tokio y dirige una compañía de software, expresó que varios pistoleros a sueldo, presuntamente contratados por el gobierno y vistiendo ropas de civil, fueron vistos en el área el día que su hermano murió.

"La hipótesis más plausible siempre ha sido y sigue siendo que las autoridades estatales estuvieron involucradas", añadió.

Miembros de la familia Will se reunieron el martes con el embajador de Estados Unidos en México, Tony Garza, y han estado en contacto con la embajada de su país y con funcionarios del consulado en Oaxaca desde el día siguiente al tiroteo.