Ombudsman expone omisión de gobierno mexicano en disputa cruenta
Ioan Grillo/AP
Viernes, 16 de Marzo de 2007
CNDH advirtió que el problema puede resurgir en Oaxaca si las muertes y violaciones a los derechos humanos no son resueltas. Foto PI/Antonio NAVA
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México, 16 de marzo. El organismo oficial de derechos humanos en México aseguró que el gobierno nacional pudo impedir la muerte de 20 personas, incluido un periodista y activista estadounidense, en los seis meses del conflicto en la ciudad sureña de Oaxaca el año pasado.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos, un organismo público e independiente, entregó el jueves un documento en que resume los acontecimientos y pide castigo por las muertes y las violaciones a los derechos humanos durante el conflicto en la capital del estado de Oaxaca.
"Hubo amenazas, persecución, agresiones físicas y actos de intimidación", indicó. "Deben ser esclarecidas y los responsables identificados y presentados ante las instancias judiciales".
En junio, un grupo de izquierdistas, sindicalistas e indígenas tomaron el centro de Oaxaca para exigir la renuncia del gobernador Ulises Ruiz, a quien acusan de llegar el poder mediante un fraude electoral en el 2004 y de reprimir con violencia a los opositores.
Los manifestantes incendiaron autobuses y levantaron barricadas al tiempo que alejaron a la policía local y ahuyentaron a los turistas de la ciudad famosa por su arquitectura colonial y su gastronomía condimentada.
Bandas armadas de origen desconocido dispararon a los manifestantes en varias ocasiones. Los activistas insistieron en que Ruiz estaba detrás de los sicarios.
El informe de la CNDH no implicó directamente a Ruiz en esos hechos, pero lo criticó junto con el gobierno federal por no intervenir para detener a los grupos armados misteriosos.
"Se evidenció la incapacidad de las autoridades estatales y el desinterés de las federales para atenderlo y darle solución" al problema, dijo la comisión.
El reporte indicó que 11 personas fueron muertas a consecuencia directa del conflicto y nueve en forma indirecta.
El periodista estadounidense Bradley Roland Will fue muerto durante un tiroteo de manifestantes con policías y funcionarios locales en octubre. Dos concejales fueron detenidos y luego liberados por falta de evidencia. Nadie ha sido responsabilizado por el asesinato.
A finales de octubre, el gobierno envió al menos 4.000 policías federales para desalojar a los manifestantes del centro de la ciudad, lo cual derivó en enfrentamientos y detenciones. La ciudad se encuentra en calma relativa desde diciembre.
la CNDH advirtió que el problema puede resurgir en Oaxaca si las muertes y las violaciones a los derechos humanos no son resueltas.