NACIONALES: Violencia en norte de México se cobra cinco víctimas
EFE
Sábado, 11 de Noviembre de 2006
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Tijuana, México. 11 de noviembre.- Cinco personas, incluido un jefe policial, fueron asesinadas en las últimas horas en dos ciudades mexicanas cercanas a la frontera con EEUU, en una ola de violencia que suma más de 1.850 muertes en todo el país en lo que va de año.
En Tijuana, los cuerpos de los hermanos Gerardo y Héctor Gaxiola Gámez, este último mando policial, fueron encontrados esta mañana en un terreno del barrio de Sánchez Taboada con varias heridas de bala cada uno y las manos esposadas a la espalda.
El atentado sucedió horas después de que el jefe policial saliera ileso de otro ataque perpetrado en la mañana del jueves, cuando un grupo de hombres armados disparó sobre dos patrullas.
En esa acción, dos agentes, una vendedora de flores y un taxista resultaron heridos leves, y un escolta de Gaxiola Gámez grave.
El alcalde de Tijuana, Jorge Hank Rhon, señaló al respecto que en los últimos días han sido varios los jefes de la policía del sector de Tijuana que han sido amenazados de muerte.
En el caso del policía asesinado, tras el primer atentado se le había puesto puso vigilancia especial, "pero solamente por un rato", lo que posibilitó que fuera atacado en la noche en su casa.
Este año el narcotráfico y la delincuencia organizada han dejado en el estado de Baja California (al que pertenece Tijuana) casi una treintena de agentes de diversos cuerpos asesinados. Tan sólo en Tijuana han caído dieciséis policías municipales.
En tanto, en Monterrey, capital del estado de Nuevo León, las autoridades descubrieron hoy los cadáveres de tres hombres, uno de ellos calcinado.
Los cuerpos fueron hallados en una carretera vecinal que conduce a la ciudad fronteriza de Reynosa, dijo a la prensa Aldo Fasci Zuazua, subprocurador de Ministerios Públicos.
Uno de los cuerpos fue calcinado, a otro se le cortó una pierna con un hacha y al tercero se le halló con los ojos vendados y las manos esposadas.
Según Fasci, en Nuevo León se han registrado alrededor de 45 asesinados a modo de ejecución relacionados con la delincuencia organizada.
Desde hace un par de años, los carteles mafiosos libran una guerra sin cuartel entre ellos y contra la policía por el control de la rutas de envío de drogas hacia EEUU.
Esa guerra, que afecta a varios estados, entre ellos los fronterizos con EEUU, el sureño de Guerrero y occidental de Michoacán, ha dejado en lo que va de año más de 1.850 muertes, más que las 1.500 del año pasado, según fuentes periodísticas.