Insuficientes los $120 mil para recuperar vivienda: investigadores

El Discurso
Miercoles, 04 de Octubre de 2017

Los 120 mil pesos que el gobierno federal ofrece a los damnificados de Chiapas y Oaxaca son notoriamente insuficientes, pues apenas cubre entre el 10 y 25 por ciento de una vivienda. Foto: PI / Octavio Nava

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Los 120 mil pesos que el gobierno federal ofrece a los damnificados que perdieron su vivienda por los sismos de septiembre en los estados de Chiapas y Oaxaca son notoriamente insuficientes, pues apenas cubre entre el 10 y 25 por ciento de una vivienda de interés social, señalaron investigadores y especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Además, advirtieron que los problemas de rezago social tienden agudizarse aún más con los problemas derivados de los sismos, por lo que es fundamental replantear el presupuesto del próximo año, y desarrollen un plan a corto y mediano plazo para responder a la emergencia dejada por los sismos del 7 y 19 de septiembre pasado.

En conferencia conjunta, especialistas del Programa Universitario de la Ciudad; de las facultades de Ingeniería y de Arquitectura, y del Instituto de Investigaciones Económicas, plantearon que los habitantes de los estados de Oaxaca, Chiapas, Morelos, Oaxaca y Puebla fueron de los más afectados, pero que la respuesta institucional y de la sociedad civil se ha enfocado en gran parte a lo registrado en la Ciudad de México.

En este sentido, los investigadores Adolfo Sánchez Almanza y Abraham Granados, del IIEc, señalaron que en un análisis preliminar, donde se cruzaron diversos datos como índices de calidad y zonas afectadas por los sismos, se encontró que los habitantes de la capital del país tienen una mayor capacidad de resiliencia.

Lo anterior significa el poder recuperarse hasta lograr mejores condiciones que las anteriores al desastre, lo cual es limitada para los sectores más desprotegidos. “Es decir, entre más vulnerable es la población, la recuperación es más lenta, por ello se requiere priorizar la ayuda y el apoyo para las personas con necesidades más urgentes”, dijo Sánchez Almanza.

Citó que en el estudio preliminar, se encontró que los 38 inmuebles colapsados en la capital del país se localizan en 36 manzanas, de las cuales 25 (764.5 por ciento) se ubican en zonas con un índice de Calidad de Vida Objetivo (ICVO) muy alto; otras 11 (29 por ciento) en el estrato alto, y 2 más (6.5 por ciento) en un grado medio.

Con estos indicadores, se estimó, por ejemplo, que la recuperación de las viviendas en las zonas como Xochimilco y Milpa Alta, con una menor resiliencia, será más lenta que en otros donde existe una situación económica más favorable.

Por su parte, Javier Delgado, director del Programa Universitario de la Ciudad, señaló la necesidad de que el sector inmobiliario ya no controle el mercado de la vivienda en la capital del país, pues esta lógica ha terminado por imponerse sobre la urgente planeación urbana.

Marco Tulio Mendoza, de Facultad de Ingeniería, dijo no sólo que los recursos que recibirán los damnificados que perdieron su vivienda es insuficiente, sino que ya se han empezado a reportar un aumento de entre 10 y 50 por ciento en el precio de los insumos de la construcción, como varilla y cemento.

Además, sugirió que ante la realidad que representa la autoconstrucción de vivienda en el país, se diseñen programas institucionales, donde incluso debería estar la UNAM, para asesorar a los damnificados en esta tarea.

En el evento, realizado en el IIEc, el especialista también se refirió a que las autoridades tengan muy definido el destino final que tendrán los desechos dejados por los sismos. Estimó que tan sólo en la Ciudad de México, el volumen de escombro podría llenar un Estadio Azteca y medio.