INTERNACIONALES: Hussein condenado a la horca
Hamza Hendawi/AP
Domingo, 05 de Noviembre de 2006
Saddam Hussein le grita a la corte tras conocer su veredicto, culpable. Foto: AP
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Bagdad, Irak. 5 de noviembre. Saddam Hussein fue condenado el domingo a morir en la horca tras ser declarado culpable de crímenes contra la humanidad por la muerte de 148 personas en 1982 en una población chií. Al escuchar la sentencia, el ex gobernante iraquí exclamó tembloroso: "Dios es grande".
El Alto Tribunal iraquí también declaró culpables y condenó a muerte a su medio hermano y otro importante funcionario de su régimen.
"Viva el pueblo y mueran sus enemigos. Viva la nación gloriosa y mueran sus enemigos", gritó Hussein con un estremecimiento evidente mientras oía el veredicto.
Posteriormente, su abogado dijo que el ex dictador había pedido a los iraquíes que rechazaran la violencia sectaria y se abstuvieran de atacar a las fuerzas estadounidenses.
Se trató de uno de los juicios más importantes en el mundo desde el proceso en los tribunales de Nuremberg a miembros del régimen nazi de Adolfo Hitler y la matanza de seis millones de judíos en el Holocausto de la Segunda Guerra Mundial.
"El veredicto contra el antiguo régimen no representa un veredicto para una sola persona. Es un veredicto sobre toda una era oscura sin par en la historia de Irak", manifestó el primer ministro iraquí Nuri al-Maliki.
Algunos temían que el veredicto exacerbara la violencia sectaria que ha colocado al país a un paso de la guerra civil, después del juicio que se extendió durante nueve meses y terminó hace casi tres meses y medio.
De inmediato estallaron algunos enfrentamientos en el distrito suní Azamiya del norte de Bagdad. En otras zonas de la capital, se escucharon disparos de celebración.
"Este gobierno será responsable de las consecuencias, con la muerte de cientos, miles o incluso cientos de miles, cuya sangre será derramada", declaró Sali al-Mutlaq, un líder político suní, al canal de televisión satelital Al-Arabiya.
Saddam y otros siete acusados fueron enjuiciados por una serie de matanzas en la ciudad de Dujail tras un intento de asesinato al entonces dictador en 1982. El partido Dawa de al-Maliki, que por entonces era opositor, se ha atribuido la conjura contra Saddam.
En las calles de Dujail, un ciudad ubicada a las márgenes del río Tigris, de 84.000 habitantes, la gente celebraba y quemaba fotos del ex presidente en momentos que se leía el fallo.
El principal abogado de Saddam, Jalil al-Dulaimi, condenó el juicio como una "farsa", y dijo que el veredicto estuvo planeado. Expresó que la defensa apelará la sentencia en un plazo de 30 días.
Las condenas a muerte son enviadas automáticamente a un panel de apelaciones de nueve jueces, que tiene tiempo ilimitado para revisar el caso. Si los veredictos y las sentencias son confirmados, las ejecuciones deben realizarse en 30 días.
Un funcionario judicial dijo a la AP que el proceso de apelación probablemente llevará entre tres y cuatro semanas, después que sean enviados formalmente los expedientes.
Durante la audiencia del domingo, Saddam se negó a atender al juez que le ordenó levantarse de su asiento. Dos alguaciles levantaron el derrocado gobernante y entonces permaneció de pie mientras era leída la sentencia.
Antes de que comenzara la audiencia, uno de los abogados de Hussein, el ex fiscal general estadounidense Ramsey Clark, fue expulsado de la sala del tribunal luego de entregar al juez un memorándum en que calificaba al juicio de parodia.
El juez principal Raouf Abdul-Raham señaló hacia Clark y dijo en inglés "lárguese".
El Alto Tribunal sentenció también a morir en la horca al medio hermano de Saddam, Barzan Ibrahim y al ex jefe de la desaparecida Corte Revolucionaria de Irak Awad Hamed al-Bandar.
El ex vicepresidente iraquí Taha Yassin Ramadan fue declarado culpable de homicidio premeditado y condenado a prisión perpetua.
Otros tres acusados fueron sentenciados a 15 años de prisión por tortura y homicidio premeditado.
Abdula Kazim Ruwayyid y su hijo Mizhar Abdula Ruwayyid eran funcionarios de Dujail, junto con Ali Dayih Ali. Se cree que fueron responsables de los arrestos.
Mohammed Azawi Ali, un ex funcionario del Partido Baath de Dujail, fue absuelto por falta de evidencias y liberado inmediatamente. Enfrenta otras acusaciones en un caso separado por la presunta masacre de civiles curdos, un juicio que continuará mientras se resuelve la apelación.
Es probable que el veredicto de culpabilidad enfurezca a los suníes radicales, que integraban la mayoría de la clase gobernante. La mayoría chií del país, perseguida durante el régimen de Saddam, probablemente vea la sentencia como un motivo de celebración.
Al-Dulaimi, el abogado de Saddam, declaró a la AP que su cliente pidió a los iraquíes que rechacen la violencia sectaria y les pidió que no ataquen a las fuerzas extranjeras.
"Su mensaje a la población iraquí fue 'perdonen, no se venguen de las naciones invasoras y su gente"', expresó al-Dulaimi.