Nuevos rostros en el América y adiós a otros conocidos

AP
Jueves, 18 de Enero de 2007

De nada le sirvió el "súper equipo", ya que el América fue eliminado en la liguilla por su enconado rival Guadalajara, que a la larga se coronó. Foto PI/Antonio NAVA

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México, 18 de enero. La consigna del América en el torneo Clausura del fútbol mexicano que comienza este fin de semana parece ser borrón y cuenta nueva.

Después de gastar unos 12 millones de dólares para el pasado campeonato de Apertura, y terminar el 2006 con las manos vacías en el año de su 90 aniversario, las Aguilas dieron de baja a algunas de sus figuras más costosas y vigilaron de cerca la billetera.

El América contrató el año pasado al delantero argentino Matías Vuoso y a los atacantes paraguayos Salvador Cabañas y Nelson Cuevas, para unirse a una nómina que ya incluía al argentino Claudio López y Cuauhtémoc Blanco.

De nada le sirvió el gasto, ya que el equipo azulcrema fue eliminado en la liguilla por su enconado rival Guadalajara, que a la larga se coronó campeón. Para colmo de males, el equipo tuvo un pésimo mundial de clubes en Japón.

Vuoso fue cedido en préstamo al Santos, el equipo de donde llegó al América, mientras que el "Piojo" López regresó a Argentina para jugar con Racing, poniéndole fin a su estadía de dos años y medio en el balompié azteca.

Como refuerzo llegó a préstamo el argentino Daniel Bilos, proveniente del Saint Etienne francés y ex jugador de Boca Juniors. El plantel anunció el miércoles la contratación del delantero ecuatoriano Luis Fernando Saritama, aunque sólo será usado en la Copa Libertadores.

El gasto por esos dos jugadores es mucho menor al incurrido en el pasado torneo, pero no hay garantía de que el América pueda dar vuelta a sus fortunas para coronarse campeón por primera vez desde el 2005.

América es sólido en la portería, donde Guillermo Ochoa sigue siendo uno de los mejores en México, y tiene a un talentoso y joven armador en Juan Carlos Mosqueda. Adelante, Blanco, a sus 34 años de edad, sigue siendo un elemento confiable para las Aguilas.

Pero fuera de eso, el club tiene poco que lucir.

Su defensa central incluye a Duilio Davino, que hace cuatro años vivió su mejor momento y tampoco era una estrella. La media cancha no ha llenado el hueco que dejó la salida de Pável Pardo al Stuttgart y adelante, Cabañas, por momentos se acuerda del fútbol que tenía en Chiapas, donde fue uno de los mejores artilleros de la liga, pero la mayor parte del tiempo es intrascendente.

Con esos ingredientes, el América tendrá un empinado camino para lograr su undécima corona, la máxima cifra en el fútbol mexicano que sólo ha alcanzado el Guadalajara.