Eslovenia y EEUU empatan 2-2
AP
Viernes, 18 de Junio de 2010
| Michael Bradley celebra el segundo gol del empate de Estados Unidos frente a Eslovania. Foto; PI/Armando ARORIZO
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JOHANNESBURGO, EE.UU. A pura voluntad, Estados Unidos volvió a remontar un partido al rescatar el viernes un empate 2-2 con Eslovenia dentro de un vibrante encuentro del Grupo C de la Copa Mundial.
Lo que los estadounidenses todavía no saben es porqué el árbitro invalidó una jugada de gol que le hubiese dado el triunfo.
Tras irse al descanso dos goles abajo, Landon Donovan y Michael Bradley nivelaron el marcador en un duelo jugado a ida y vuelta. El suplente Maurice Edu remeció las redes en una jugada que invalidó el árbitro malí Koman Coulibaly, aunque nunca quedó claro el motivo.
"Estoy un poco molesto", dijo Donovan. "No sé cómo nos robaron ese último gol".
"Fue una buena definición y un buen gol. No estoy seguro qué fue lo que pitó. No nos dijo qué fue lo que pitó".
Donovan anotó a poco de comenzado el segundo tiempo, a los 48 minutos, con un soberbio remate sin ángulo desde la derecha.
Bradley, el hijo del entrenador Bob Bradley, empató a ocho del final al rematar dentro del área tras recibir un balón que Jozy Altidore dejó picado con un cabezazo.
Valter Birsa y Zlatan Ljubijankic pusieron en ventaja a los eslovenos en el estadio de Ellis Park de Johannesburgo.
El tanto de Birsa fue una perla: un sensacional remate fuera del área. Libre de marcas, el volante esloveno tuvo todo el tiempo del mundo para apuntar desde 25 metros y rematar con un soberbio zurdazo a los 13.
Estados Unidos pasó a tomar la manija del partido pasada la media hora, pero encajó el segundo en un contragolpe culminado brillantemente por Ljubijankic a los 42. El delantero definió cruzado ante la inútil salida del arquero Tim Howard.
Eslovenia, que venía de derrotar 1-0 a Argelia en el debut, sigue al frente del grupo con cuatro puntos.
Estados Unidos llegó a las dos unidades, ya que en el partido previo empató 1-1 con Inglaterra gracias al gol de Clint Dempsey por el tristemente célebre fallo del arquero Robert Green.
"Perdimos la concentración en el segundo tiempo y los estadounidenses lo aprovecharon", comentó el entrenador de Eslovenia, Matjaz Kek. "Teníamos ventaja contra Estados Unidos, pero no superamos la presión".
Aunque remontó, Estados Unidos se marchó masticando amargura. A priori era favorito para salir con el triunfo y dar un paso firme hacia la clasificación, que ahora deberá buscar en la última fecha contra Argelia.
Empatar contra Eslovenia, el país más pequeño en población de los 32 participantes del Mundial, no estaba escrito en el guión estadounidense, sobre todo porque el 1-1 con los ingleses fue considerado como un triunfo.
Y lo que más duele fue que en los instantes finales tuvieron contra las cuerdas a Eslovenia y le anularon el gol a Edu por una aparente falta.
El partido arrancó con los papeles invertidos a lo que se había presagiado. En los primeros compases, Eslovenia generó las mejores ocasiones, un cabezazo de Ljubijankic por encima el travesaño tras un tiro libre y luego Milivoje Novakovic no alcanzó a enganchar un centro de Birsa por la derecha.
La gran virtud para los eslovenos fue su mejor pegada al disponer de ocasiones, lo cual se plasmó con los tantos del primer tiempo.
Aprovechando la pasividad de la zaga de Estados Unidos, Birsa prendió un zapatazo al ángulo izquierdo que dejó petrificado a Howard.
Cuando los estadounidenses hacían méritos para irse con el empate al descanso, Eslovenia aumentó en una jugada de contragolpe concebida por Novakovic y culminada espléndidamente por Ljubijankic, tocando de derecho ante la barrida de Howard.
El técnico Bradley puso toda la carne en el asador con un par de cambios para la reanudación: Benny Feilhaber por Robbie Findley y Edu por José Torres.
La intensa presión estadounidense rindió dividendos casi que inmediatamente. El central Bostjan Cesar no supo cortar una pelota que Steve Cherundolo sirvió hacia la derecha y Donovan avanzó para encarar al arquero Samir Handanovic. Tendido en la banda, Donovan esperó hasta el último momento para poner el centro, pero al final remató tan potente que Handanovic prefirió mover la cabeza y evitar recibir el impacto.
El martilleo estadounidense fue insistente, si bien sin profundidad, hasta que Bradley logró encontrar la pelota que anidó al fondo con un toque de derecha.
"Estoy orgulloso de nuestros muchachos. No sé si hay muchos equipos que hubiesen respondido así después de estar abajo 2-0", remarcó Donovan.
Pero también lamentó el hecho de verse obligados a remontar en un partido: "No podemos seguir poniéndonos en estas situaciones difíciles. Emocionalmente, tenemos que recuperarnos para un partido duro contra Argelia. Todavía tenemos buenas oportunidades de avanzar".
