Campeones: La magia de Messi vuelve a impulsar al Barcelona
AP
Martes, 06 de Abril de 2010
El argentino Lionel Messi, salta sobre Mikael Silvestre de Arsenal tras anotar un gol para Barcelona. Foto: AP
|
|
ver galería
|
BARCELONA, España. Fueron veinte minutos brutales, en los que Lionel Messi apagó un incendio y convirtió el partido contra Arsenal en un paseo para Barcelona.
En otra actuación excelsa, Messi metió los cuatro goles con los que el club español vapuleó 4-1 a los ingleses para clasificarse a las semifinales de la Liga de Campeones, donde busca revalidar el título.
Arsenal dio un susto a los dueños de casa al abrir el marcador a los 18 minutos por intermedio de Nicklas Bendtner. Ese resultado clasificaba a los ingleses a la semifinales de la Liga de Campeones ya que el partido de ida había terminado 2-2.
Pero Messi le devolvió el alma al cuerpo al equipo local con una sensacional ráfaga de tres goles en el mismo primer tiempo, redondeando otra actuación memorable.
Después que Bendtner abrió la cuenta para Arsenal al culminar en dos tiempos un contragolpe, Messi se cargó a su equipo encima.
Sólo tres minutos duró la ventaja inglesa, ya que el delantero argentino aprovechó un mal despeje tibio de la defensa para igualar el duelo.
La voracidad goleadora de la "Pulga" no acabó ahí al convertir a los 37 y 42 minutos. Su tercer tanto fue de brillante ejecución al entrar por el medio al área y le hizo un sombrerito al arquero Manuel Almunia.
Puso cifras definitivas a los 88 con otra perla de gol. Recuperó la pelota tras un rechace inicial de Almunia y remató entre las piernas del portero desde un ángulo ajustado por la izquierda.
Arsene Wenger, el técnico de Arsenal, quedó maravillado: "No conozco muchos jugadores que puedan meter ese gol, que era casi imposible".
"Está en su mejor momento, le quedan 6 o 7 años si no le pasa nada, toquemos madera, y puede hacer algo increíble", indicó.
Messi reaccionó con su habitual modestia.
"Estos cuatro goles me dan mucha alegría", dijo Messi a Televisión Española. "Teníamos que hacer este partido y empezamos mal, pero lo arreglamos. Lo importante es que el equipo siga así, trabajando y haciéndolo bien".
Barcelona se las verá ahora en semifinales con el Inter de Milan, un rival que ya enfrentó en la etapa de grupos de la actual edición. El club italiano venció de visita 1-0 al CSKA Moscú para avanzar a la ronda de los cuatro mejores por primera vez en siete años.
Messi, de quien ya no hay adjetivos que sirvan para describirle, se adueñó de la cima de la tabla de goleadores del certamen con ocho tantos. Quien le sigue, con siete, es el portugués Cristiano Ronaldo, cuyo Real Madrid fue eliminado en octavos de final.
También es el primer jugador en la historia del torneo que marca cuatro veces en una eliminatoria con duelos de ida y vuelta.
"Es una suerte poder vivirlo. Es un jugador de gran nivel", dijo el entrenador azulgrana Pep Guardiola. "No hay palabras para describirle, hay que verlo, sólo eso. Mirarlo es la mejor sensación que hay".
Pese a las ausencias del delantero Zlatan Ibrahimovic y los defensores Carles Puyol y Gerard Piqué (suspendidos), Barcelona demostró la abundancia de recursos que tiene a disposición.
Guardiola optó por Bojan Krkic en vez de Thierry Henry en lugar de Ibrahimovic. La dupla de centrales fue conformada por el mexicano Rafael Márquez y el argentino Gabriel Milito, titular en Europa después de casi dos años.
Wenger también echó de menos a varios titulares debido a las lesiones de Cesc Fábregas, Andrei Arshavin, William Gallas y Sol Campbell. Tomas Rosicky salió a jugar, pese a que arrastraba una molestia en los isquiotibiales.
Los cambios de Wenger no le rindieron, particularmente el de Mikael Silvestre al lado de Thomas Vermaelen. Silvestre fue quien el mal despeje en el primer gol de Messi.
Pero los primeros 15 minutos no fueron el aluvión azulgrana de la ida, uno en el que las providenciales atajadas de Almunia evitaron un goleada de proporciones mayúsculas.
Arsenal presionó con fuerza y trató de sorprender al contragolpe ante cualquier pelota suelta de Márquez y Milito. Fue así que consiguió el primer gol. Abou Diaby aprovechó un balón perdido por Milito, cedió a Theo Walcott por la derecha y éste cedió para que Bendtner anotara.
Pero los Gunneros no tuvieron un antídoto para contener a Messi, quien empató al brasileño Rivaldo como el máximo goleador de Barcelona en la historia del torneo.