Abre el Museo de Arte Popular la exposición Poemas del alma

El Discurso
Martes, 15 de Agosto de 2017

Poemas del alma tiene que ver con esta etapa de recuperación personal en muchos sentidos, no sólo físico sino también espiritual, y tiene que ver con estos elementos que son una mezcla de la fe con la estética. Foto: PI

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* La muestra, integrada por 11 piezas elaboradas de manera artesanal por el creador mexicano Rafael Alonso Pérez, reflexiona sobre la fe y la estética a través del uso de materiales reciclados

* El público, que podrá visitar la exhibición hasta el 15 de octubre, encontrará nuevos sentidos a huacales, cajas de vino, abanicos antiguos, cristal, concha nácar y jade, entre otros objetos

La exposición Poemas del alma, del artista yucateco Rafael Alonso Pérez, fue inaugurada la tarde de este sábado por el autor en compañía del director del Museo de Arte Popular, Walther Boelsterly, recinto donde su obra permanecerá en exhibición hasta el 15 de octubre.

Como una mirada a la reinvención física, mental y espiritual,

“Poemas del alma tiene que ver con esta etapa de recuperación personal en muchos sentidos, no sólo físico sino también espiritual, y tiene que ver con estos elementos que son una mezcla de la fe con la estética, porque la fe tiene una parte bella”, expresó Rafael Alonso Pérez durante la inauguración de la muestra.

Integrada por 11 piezas —cinco navíos y seis oratorios— elaboradas con materiales reciclados encontrados en las calles y tianguis de pulgas, la exposición muestra la faceta recolectora del artista, quien aseguró que las piezas evidencian la importancia de las segundas oportunidades.

“Así como el huacal tuvo una segunda oportunidad, uno también busca esa segunda oportunidad de hacer nuevas cosas”, expresó. “Los barcos, que son un símbolo del viaje, del camino, del tránsito, de la ida y de la necesidad de seguir andando, están hechos básicamente con materiales que se les da una segunda oportunidad, cajas que nadie les hace caso”.

En este sentido, el director del Museo de Arte Popular celebró la obra del creador yucateco como el rescate no sólo de materiales, sino también de técnicas milenarias con las cuales su trabajo artesanal multidisciplinario ha logrado resignificar las cosas cotidianas, brindándoles un significado nuevo y transformador.

“La obra alcanza algo poco logrado en artistas contemporáneos que trabajan estos oficios. Cuando los escultores de chatarra hacen una pieza y seguimos viendo la chatarra, tristemente no se logró la pieza, y en este caso Rafael lo que hace es sacarle beneficio al material y darle esta brillantez al utilizar el concepto y su unión con el material”, consideró Boelsterly.

Rafael Alonso Pérez, también subdirector y curador en el Museo de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, indicó que los asistentes podrán ver elementos como concha nácar y concha de abulón, jade, niños dios de madera y uno de marfil, cajas de madera (huacales), cristal, abanicos antiguos —algunos raptados a su familia—, entre otras piezas que se ha encontrado en sus viajes.

“Aprendes a ser selectivo con los materiales; entre tanta cosa, uno distingue lo que necesita y el Museo de Arte Popular tiene esta esencia de manufactura, yo creo que más que artista soy un artesano que elabora estas piezas con materiales del arte popular”, expresó en entrevista.

Ubicada en el segundo piso del Museo de Arte Popular, en la Sala “Pieza del Mes” que a su vez se encuentra en la Sala 4 “El arte popular y lo fantástico”, la muestra exhibe los navíos Duerme, Pureza, Antigua canción de cuna, Un sueño y Arrullo-arroyuelo. “Lo poético es la lectura de los elementos: el aire está simbolizado por el abanico, que suple a las velas del barco, y las ruedas, significan el movimiento del barco, el andar”, explicó el creador.

Acerca de sus piezas.

Y agregó: “Los niños dios tienen que ver con esa necesidad de creer en que la humanidad necesita retomar la inocencia y volver a ser buena”. La exposición también está integrada por los nichos Un instante de mi pasado, Canción de enero, Plegaria de oriente, Ofrendario, Pequeño poema infinito y Oratorio.